La traducción de DAW (Digital Audio Workstation) es estación de trabajo de audio digital. Para entenderlo de una forma más clara, es el sistema por medio de hardware o software dedicado que nos permitirá grabar y editar audio digital.
En este post dejaré de lado el hardware dedicado y me centraré en el software: la aplicación que instalaremos en nuestro sistema para lograr nuestro objetivo para la mayor facilidad. Ya seas un músico que quiere componer nuevas ideas, productor, postproductor, locutor de radio/podcast o cualquier proyecto relacionado con el audio digital, necesitarás apoyarte en un DAW. Este DAW será la herramienta que nos ayudará en nuestras tareas.
Por desgracia, la mayoría no dispondrá de todo el tiempo del mundo para especializarse en los numerosos DAWs disponibles en el mercado para compararlos. Además, aún siendo la persona más aburrida (y rica) del planeta, seguramente estés empezando a aprender y todavía no tienes el criterio con los que compararlos.¿ Porqué ibas a querer cambiar de herramienta? Quizás porque no te adaptas correctamente o bien porque te das cuenta que no es el usado en la industria para la que quieres trabajar. Tenemos que entender que el DAW será nuestro compañero de viaje a lo largo del tiempo. Y pese a que todos los DAWs tienen muchísimos puntos en común, aprender a usar otro diferente es una tarea tediosa que os recomiendo evitar.
Algunos de los puntos claves que debéis valorar, es que sea compatible con vuestro sistema operativo, por ejemplo Logic Pro X solo funciona con OS X y FL solo funciona con Windows, así como versiones determinadas de cada sistema. También debes comprobar que tu ordenador cumple con los requisitos del DAW. Si tu ordenador no tiene muchas prestaciones y no piensas actualizarlo, la lista de DAWs a las que puedes optar se reduce drásticamente. Por supuesto, también debes conocer tu presupuesto, teniendo en cuenta que probablemente necesitarás una interface de audio. También hay otros elementos claves, como trabajar con Pro Tools si necesitas llevar tus proyectos a un estudio profesional, o trabajar con una herramienta como Ableton live si vas a producir música electrónica. Por supuesto, no es obligatorio y hay muchas alternativas, pero es recomendable.
Pese a que os voy a dar a conocer las versiones estándar, en la mayoría de casos os aconsejo optar por demos o versiones limitadas de los DAWs. Estas serán más económicas o incluso gratuitas, como puede ser Garageband de Logic Pro X y Pro Tools First de Pro Tools 12.
Para facilitaros la elección, deberéis conocer vuestros principales objetivos. Trataré de resumir las características de algunos de los principales DAWs. Veamos los más comunes:
Avid Pro Tools 12
Pro Tools es el estándar en la industria profesional, lo que hace tener numerosos usuarios. Seguramente es la herramienta más potente para grabar, editar y mezclar, con una interfaz muy limpia que hace que su uso sea muy intuitivo. Pero conforme lo dominas te das cuenta que esa sencillez esconde numerosas potentes herramientas que desde un primer momento no enturbian la curva de aprendizaje.
El software viene con un paquete de plugins muy completo en formato AAX (64 bits), hasta con compresor con sidechain, pese a que se eche en falta alguna herramienta por defecto como el compresor multibanda, el corrector de afinador o el analizador de espectro. El equipo de Avid ha sabido compensar en los últimos lustros las carencias que tuvo, frente a sus competidores, en versiones anteriores con los instrumentos MIDI, incluyendo 60 instrumentos virtuales y 2GB de samples y bucles (loops) profesionales, así como las herramientas como Elastic Audio o la esperada (o demorada) congelación de pistas. También han incluido una interesante manera de trabajar en colaboración, compartiendo hasta 1GB de proyectos en la Avid Cloud.
Estar en lo mas alto le ha expuesto a tener detractores e incondicionales, por lo que no debería extrañarte encontrarte algún hater o algún devoto del software de Avid. Por cierto, hace tiempo que ya no requiere de una interface Avid/Digidesign para funcionar.
Hermano Pequeño: Pro Tools First. Pese a la limitaciones respecto a Pro Tools 12, como la de tres únicos proyectos y 16 pistas, es una herramienta gratuita para comenzar con las herramientas de Avid.
Precio: 23€/mes (suscripción anual) o 559€ licencia completa.
Requisitos: Intel i5, 16GB de RAM, Windows 7/Mac OS X.8.5 y llave ilok 2 o 3.
Pros: Edición precisa y ágil, Interface clara e intuitiva, librería de loops, Pro Tools First es gratuito (con limitaciones), todas sus herramientas potentes.
Contra: Su precio, no es compatible con plugins VST o Audio Units (Mac), requiere de una licencia HD para mezcla en 5.1 y otras opciones avanzadas de video (requiere de una licencia más cara y hardware Avid HD), requisitos exigentes (tanto de hardware como software).
Apple Logic Pro X
Otro de los DAW más usados es Logic Pro X de Apple, exclusivo para los usuarios de ordenadores Macintosh. La interface, aún pareciendo más compleja que la de Pro Tools, es bastante intuitiva y con una curva de aprendizaje bastante sencilla. Aunque quizás su fuerte es su uso como herramienta creativa para componer y producir música, no se queda atrás en la mezcla.
Me atrevería a decir que los plugins (Audio Units), instrumentos virtuales y loops es el más completo de todos los DAWs expuestos, algo a destacar con un precio mucho más accesible que el resto. El programa incluye unos 2GB de instrumentos y muestras, que si no son suficientes, te ofrece hasta 36GB en la nube para descargar. Destacaría Drummer, un tipo de pista alucinante de batería para generar fácilmente ritmos que pueden incluso pueden seguir tu base de bajo o guitarra.
Hermano pequeño: Garageband. Gratuito con los nuevos Macs. Lo que a priori parece una herramienta mucho más sencilla que Logic Pro en cuanto a enrutamiento, tiene herramientas más que suficientes para comenzar con el mundo del audio digital. Al igual que con Logic Pro, te permite componer rápidamente tus propios temas, incluso sin tener ni idea de música.
Requisitos: Mac, OS X.11, 4GB de RAM, procesador 64 bits (Core2Duo, Xeon, i3, i5, i7)
Precio: 229€
Pros: Drummer, Rendimiento, precio ridículo para sus prestaciones.
Contras: Solo para Mac, sin soporte VST.
Steinberg Cubase Pro 9.5
Uno de los DAWs con más recorrido es Cubase Pro. Aunque es una herramienta menos popular que las anteriores, no deja de ser un potente DAW que puede usarse para componer, para grabar, mezclar, editar o incluso para producir música electrónica. Estaría más cercano a la creatividad de Logic Pro que de la potencia de Pro Tools, aunque a su propia manera.
Incluye una pista de sampler brillante, que nos permite lanzar sonidos con muchísima facilidad y una libraría que nos ofrece cientos de samples.
Hermanos Pequeños: Cubase Artist 309€, Cubase Elements 99,99€ y Trial gratuito de 30 días. Aquí tienes las diferencias entre las 3 versiones.
Requisitos: Mac, OS X.11 o superior y Windows 7 o superior (64 bits), procesador multicore 64 bits y 4GB de RAM, USB eLicencer.
Precio: 559€
Pros: Estable, variedad de VSTs.
Contras: Edición menos intuitiva, precio, interface con 2 monitores.
Ableton Live 10
El software Ableton es un DAW muy diferente al resto de nombrados hasta el momento. Es una aplicación enfocada para el directo de música electrónica, lanzando samples y arreglos con una facilidad pasmosa. Sin embargo, miles de productores lo han utilizado para componer sus propios temas. La función non-stop junto a numerosos Samples, sintetizadores, presets y otros efectos , nos permita hacer cambios sin que la música se detenga, trabajando en tiempo real.
Pese a que cuenta con herramientas para poder realizar grabación mezcla, no es tan ágil como el resto de DAWs.
Hermanos Pequeños: Live Intro (79€), Live Standard (349€)
Requisitos: Mac, OS X.11, 4GB de RAM, procesador 64 bits (Core2Duo, Xeon, i3, i5, i7)
Precio: 599€
Pros: Non-stop, Permite el uso de AU (mac), herramientas Max for Live y VST.
Contras: Complicada mezcla, edición y grabación.
Cockos Reaper 5
No podía terminar la lista sin mencionar a Reaper como uno de los DAW a tener en cuenta. El software de Cockos está en constante crecimiento.
No andaremos con rodeos, su principal fuerte es que funciona en casi cualquier ordenador (sí, los viejos también). Esa prestación no lo hace solo interesante para ordenadores viejos, dado que bajo la poca demanda de la aplicación, es sumamente estable para grabaciones multipistas en directo y similares. Además, si su precio para uso personal es irrisorio por sus prestaciones (poco más de 50€), todavía lo es más que puedas descargarlo y usar todas sus funciones completamente durante 30 días que además, sigue funcionando igual cuando el periodo expira.
Otro de sus fuertes es la compatibilidad con VST, AU y Rewire hace que puedas hacer uso de casi cualquier plug-in e instrumento comercial o gratuito.
Con diferencia, es el DAW más personalizable de todos, aunque no siempre es la mejor opción cuando lo que quieres es sentarte a grabar, componer, mezclar o similar.
No nos engañemos, Reaper es rápido, económico y funcional, pero no todo es bonito. Su interface es mucho menos intuitiva y sus menús más enrevesados que otros DAWs. Los plugins son menos vistosos y funcionales que el resto
Hermanos Pequeños: Reaper tiene una demo (ilimitada) con todas las funcionalidades.
Requisitos: Mac 10.5 o superior, Windows XP o superior.
Precio: 52.25€ o 195.95€ (Uso comercial)
Pros: Funciona casi en cualquier PC o Mac, Permite el uso de AU (mac) y VST, Rewire, personalizable.
Contras: Necesidad de Instrumentos y plugins externos. Complicado al inicio.
Se podría hablar largo y tendido sobre DAWs interesantes como Presonus Studio One 3, Cakewalk Sonar, MOTU Digital Performer, Mixcraft Pro Studio, sin embargo, he preferido simplificar para simplificar la decisión.
También hay otras herramientas creativas que no hay que ignorar enfocadas a la música electrónica como Ableton Live. Si es tu campo, échale un vistazo a Propellerhead Reason, FL Studio, Bitwig Studio.
Por cierto, los precios son aparecen en la webs oficiales. Puedes probar suerte en otras tiendas para ahorrar unos euros.
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